Había un caballo que no quería correr como los demás caballos. Un día encontró un brécol, un queso y una cartera, que tenía dentro una máscara de color cobrizo. Cuando se puso la máscara le entraron ganas de correr y cabalgar y se marchó de la granja para correr y cabalgar a un corral nuevo.
Gala Tabernero. 3º Primaria. Cantalojas. Guadalajara
Gala Tabernero. 3º Primaria. Cantalojas. Guadalajara
En un país muy lejano había un gran rayo más ruidoso que un trueno. Cuando estaba aburrido destruía todo lo que pillaba. Sólo lo podía detenerle Thor, el dios del Rayo. Pero no podía detenerle y entonces llamó a todos los dioses y todos juntos lo consiguieron y el país quedó feliz para siempre. Comenzó a llover y cayó un gran rayo. La gente creía que el gran rayo había vuelto pero no era él, y este rayo desapareció enseguida.
Gala Tabernero. 3º Primaria. Cantalojas. Guadalajara
Estaba yo jugando con mis muñecas y de repente oí un ruido que venía del jardín.
Lo que vi me dejó impresionada, eran unos marcianos.
Yo les vi y... ¡Oh, Dios mío! ¡Venían al salón, justo donde estaba yo y mis cosas! Mis cosas eran las chucherías.
Los marcianos entraron en mi casa y yo corrí a coger mis chucherías para que no me las quitaran...
-CONTINUARA-
Esther, 5ºB, Colegio Público Zulema. Alcalá de Henares (Madrid)
Lo que vi me dejó impresionada, eran unos marcianos.
Yo les vi y... ¡Oh, Dios mío! ¡Venían al salón, justo donde estaba yo y mis cosas! Mis cosas eran las chucherías.
Los marcianos entraron en mi casa y yo corrí a coger mis chucherías para que no me las quitaran...
-CONTINUARA-
Esther, 5ºB, Colegio Público Zulema. Alcalá de Henares (Madrid)
Georgina Ceballos Bustos, colegio Francisco de Asís, curso 2º año básico. Lota
Gabriela Chacón, tercer año, colegio Eleazar López Contreras. Venezuela.
Al finar de una carrera desenfrenada, David consiguió burlar a la policía.
Había unos niños huérfanos en la calle buscando comida, entonces David les dio todo el pan. Mientras, en Madrid, José Álvarez Del Manzano salía a la calle para decir a su hija que se tenía que casar.
En el mercado David ayudo a una señora a comprar y la señora cogió una manzana y se la dio a un niño pobre y el de la tienda se enfadó muchísimo.
A David le encerraron en una mazmorra y estaba Eva que se hacia pasar por una vieja y le dio un camino para ir a una cueva y coger una lámpara y David entonces vio una alfombra que les acompañó para saber donde estaba la lámpara y la encontró. De repente la alfombra tocó un objeto y se empezó a derretir la cueva, la alfombra y David salieron, le dieron la lámpara y le tiró al suelo
y entonces David tenía en el bolsillo la lámpara y de ahí le empezaron a salir las cosas bien.
David Hernández, 6º de primaria, colegio Luz Casanova. Madrid
Me han dicho, que he dicho un dicho, pero ese dicho no lo he dicho yo. Porque si yo hubiera dicho ese dicho estaría muy bien dicho por haberlo dicho yo.
Luz María Sabater García, 2º B,
colegio SALESIANOS. CABEZO DE TORRES. Murcia.
Luz María Sabater García, 2º B,
colegio SALESIANOS. CABEZO DE TORRES. Murcia.
En el prado de la casa del señor Conejo había una flor hermosa, su perfume atraía a todo el que pasaba por el lugar. La mariposa Maruja la envidiaba, porque opacaba su belleza. Trataba de alimentarse de esa flor con el fin de verla marchitarse y así una vez terminada su tarea nadie podría mirarla ya que así de fea terminaría sus días solitaria y triste.
Un día al prado llegó el sobrino de don Conejo el cual le gustaba atrapar mariposas, para aumentar su colección de mariposas, al ver que en el jardín había una mariposa muy linda y como era ambicioso sólo él podría tenerla, y fue a atraparla. Ella entusiasmada en sus maldades por destruir a la hermosa flor no se dio cuenta que ella sería una presa fácil para el sobrino de don Conejo. Atrapada, se lamentaba que por ser envidiosa ella había perdido y ahora ella sería victima de la ambición de otra persona que sólo quería atrapar la belleza, que es efímera...
Martín Correa. 1ºA Básico. Colegio Alianza Francesa. Curicó.
Un día al prado llegó el sobrino de don Conejo el cual le gustaba atrapar mariposas, para aumentar su colección de mariposas, al ver que en el jardín había una mariposa muy linda y como era ambicioso sólo él podría tenerla, y fue a atraparla. Ella entusiasmada en sus maldades por destruir a la hermosa flor no se dio cuenta que ella sería una presa fácil para el sobrino de don Conejo. Atrapada, se lamentaba que por ser envidiosa ella había perdido y ahora ella sería victima de la ambición de otra persona que sólo quería atrapar la belleza, que es efímera...
Martín Correa. 1ºA Básico. Colegio Alianza Francesa. Curicó.
En el país de España, hace miles de años, hubo un rey malvado que solo quería matar. Los súbditos se morían de miedo pero un día llegó el brujo y lo convirtió en jirafa. Desde aquel día todos festejaban y la reina lloraba.
Lucas. 4ºB, colegio Rosario Vera Peñaloza.
Lucas. 4ºB, colegio Rosario Vera Peñaloza.
Érase una vez una niña llamada Isabel que vivía en un barrio de Sevilla. Esta niña tenía 17 años y su madre la estaba atosigando todo el rato con qué carrera iba a hacer. Una noche Isabel estuvo dándole vueltas al asunto, por la mañana se despertó y dijo a su madre:
-Mamá, voy a ser profesora de Educación Infantil, porque ayer vi a una niña que tenía unos 4 años y la ayudé porque sus padres se habían olvidado de que ella estaba jugando con un niño de su edad. Yo la ayudé a llevarla a la comisaría, ella no sabía la dirección de su casa, menos mal que la niña llevaba un colgante que en la medalla ponía Ana Agudo Mijo. La policía localizó a la familia Agudo Mijo, la llevaron a su casa y yo me quedé tranquila.
-¿Isabel, estás segura de que vas a estudiar esa carrera?
-Sí, mamá.
Y así Isabel consiguió el sueño que ella quería.
-Mamá, voy a ser profesora de Educación Infantil, porque ayer vi a una niña que tenía unos 4 años y la ayudé porque sus padres se habían olvidado de que ella estaba jugando con un niño de su edad. Yo la ayudé a llevarla a la comisaría, ella no sabía la dirección de su casa, menos mal que la niña llevaba un colgante que en la medalla ponía Ana Agudo Mijo. La policía localizó a la familia Agudo Mijo, la llevaron a su casa y yo me quedé tranquila.
-¿Isabel, estás segura de que vas a estudiar esa carrera?
-Sí, mamá.
Y así Isabel consiguió el sueño que ella quería.
Eva Zuazo Martínez, curso 5º primaria, colegio Rafaela Ibarra. Madrid.
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